
Yo pienso que todos somos creativos a nuestra manera. No se trata sólo de ser creativos escribiendo, pintando, bailando… si no de encontrar …
Creatividad
Jesus Armando Tapia Gallegos ™ MTDE
Autor y Director Estratégico con resultados probados en impulsar el crecimiento del negocio.

Yo pienso que todos somos creativos a nuestra manera. No se trata sólo de ser creativos escribiendo, pintando, bailando… si no de encontrar …
Creatividad





«A Christmas Carol» de Charles Dickens está dividido en cinco capítulos, que el autor llamó «staves» (estrofas), siguiendo una metáfora musical, ya que el título hace referencia a un villancico.
Cada capítulo representa una parte importante de la transformación del protagonista, Ebenezer Scrooge:
Esta estructura refuerza el carácter didáctico y emocional de la obra.
Te regalo a continuación, una copia digital de esta obra imperecedera:
«And so, as Tiny Tim observed, God bless Us, Every One !«
Charles Dickens, A Christmas Carol.
Regresa por tiempo limitado el documental mas completo de el SOLSTCIO DE INVIERNO. ¿Qué se celebra en esta fecha? ¿Qué pensaban nuestros antepasados? ¿Porqué razón es una de las celebraciones astronómicas mas importantes de la humanidad? Todas las respuestas aquí, en un documental que me llevó siete años el realizar.

La ilusión de superioridad es un sesgo cognitivo que nos lleva a creer que somos mejores que los demás en ciertas áreas, como habilidades, inteligencia o características personales. Este fenómeno, también conocido como el efecto arriba del promedio (better-than-average effect), ocurre cuando sobrevaloramos nuestras capacidades y subestimamos las de los demás.
Este sesgo fue estudiado por primera vez por los psicólogos David Dunning y Justin Kruger, quienes encontraron que las personas tienden a sobreestimar sus competencias, especialmente en áreas en las que tienen conocimientos limitados.
Un caso clásico ocurre en la conducción. La mayoría de las personas se considera mejor conductor que el promedio, lo cual es estadísticamente imposible. Este mismo sesgo se observa en áreas como el trabajo en equipo, donde muchos piensan que son más colaborativos o efectivos que sus compañeros.
En el ámbito profesional, un empleado puede creer que realiza su trabajo significativamente mejor que otros, lo que puede dificultar la recepción de críticas constructivas y el trabajo en equipo.
Aunque puede tener efectos positivos al aumentar la confianza, también puede generar problemas en diversas áreas:
Aunque es difícil eliminar este sesgo, podemos reducir su impacto mediante las siguientes estrategias:
“El primer paso hacia la sabiduría es reconocer lo que no sabes.”
— Socrates
Esta frase resalta la importancia de aceptar nuestras limitaciones como un camino hacia el crecimiento personal y profesional.
Para explorar más sobre la ilusión de superioridad y cómo superar este sesgo, te recomendamos el libro Thinking, Fast and Slow de Daniel Kahneman, que analiza cómo nuestros sesgos influyen en nuestras decisiones y percepciones.
La ilusión de superioridad nos enseña que, aunque es natural querer pensar bien de nosotros mismos, es crucial mantener una perspectiva equilibrada y realista. Al buscar retroalimentación y reconocer nuestras limitaciones, podemos mejorar nuestras relaciones, decisiones y habilidades.
¿Alguna vez te has dado cuenta de que sobreestimaste tus habilidades en algo? ¿Qué aprendiste de esa experiencia? Comparte tus reflexiones en los comentarios y acompáñanos mañana para explorar otro sesgo cognitivo: Heurística de disponibilidad. ¡No te lo pierdas!


La festividad judía de Hanukkah o Janucá en 2024 se celebrará del 25 de diciembre al 2 de enero. La festividad comienza con el encendido de la primera vela de la menorá, y cada noche se enciende una vela hasta que se encienden todas en la octava noche.
La fecha de Hanukkah depende del calendario hebreo, que no siempre coincide con el calendario gregoriano. En 2024, la festividad coincide con la Navidad.
Hanukkah es una de las festividades más importantes de la comunidad judía y se conoce popularmente como la Fiesta de las Luces. Conmemora la reinauguración del templo de Jerusalén, que fue devuelto a los judíos en el siglo II a.C.

Svefn-g-englar, 1999 / Directed by: August Jakobsson taken from the single https://sigur-ros.co.uk/get/svefn/ album: https://sigur-ros.co.uk/get/agaetis/

«Los memes de Internet encapsulan algunos de los aspectos más fundamentales de Internet en general y de la cultura participativa de la Web 2.0 en particular.» Limor Shifman – Memes in Digital Culture
En la era de la hiperconectividad y las redes sociales, los memes han dejado de ser un mero recurso de entretenimiento para convertirse en un lenguaje universal. Este fenómeno, originado en internet, ha permeado incluso los espacios más formales, como el ámbito profesional. ¿Qué implica hablar en clave de memes en estos contextos? ¿Es un signo de adaptación a las nuevas generaciones o una amenaza a la seriedad corporativa?
El lenguaje profesional ha evolucionado de manera significativa en los últimos años. De los correos electrónicos estructurados y jerárquicos, hemos pasado a plataformas colaborativas como Slack, Teams y WhatsApp, donde las interacciones son más informales. En este contexto, los memes se han convertido en un recurso frecuente para transmitir ideas de manera rápida, ingeniosa y, muchas veces, desdramatizada.
Por ejemplo, en una reunión virtual sobre cambios organizacionales, alguien puede enviar un meme de «This is fine» (el perro en la casa en llamas) para expresar una sensación general de caos sin necesidad de extenderse en palabras. Este acto no solo refleja la emoción del equipo, sino que también aligera tensiones, fomenta la conexión y facilita un sentido compartido de humor.
No todo es diversión en el mundo de los memes corporativos. Existen riesgos que no deben subestimarse:
Hablar en clave de memes en el ámbito profesional es una tendencia que refleja la adaptación de las empresas a un mundo en constante cambio. Si bien puede ser un recurso poderoso para conectar, comunicar y humanizar, su uso requiere un equilibrio cuidadoso. Como toda herramienta, los memes deben emplearse con criterio y responsabilidad, reconociendo que detrás de cada mensaje hay un receptor con expectativas y sensibilidades únicas.
Al final, lo importante es recordar que el lenguaje, sea visual, textual o digital, es un medio para construir puentes y no barreras. Hablar en memes puede ser una expresión de modernidad, pero nunca debe comprometer la esencia del respeto y la profesionalidad que toda interacción laboral merece.

La falacia del costo hundido ocurre cuando persistimos en una decisión o inversión debido a los recursos ya invertidos, a pesar de que continuar sea claramente irracional o perjudicial. Este sesgo se basa en nuestra aversión a aceptar pérdidas y nuestra tendencia a querer «recuperar» lo invertido, aunque esto sea imposible en muchas situaciones.
Richard H. Thaler, ganador del Premio Nobel de Economía, describe este fenómeno como uno de los principales errores en la toma de decisiones económicas, pues nos lleva a ignorar los costos futuros y los posibles beneficios de alternativas mejores.
Imagina que has comprado boletos costosos para un concierto al aire libre, pero el día del evento el clima es frío y lluvioso. Aunque no disfrutes el concierto bajo esas condiciones, decides ir porque «ya pagaste por los boletos». Este es un ejemplo clásico de la falacia del costo hundido: el dinero ya está gastado, y la decisión racional sería quedarte en casa para evitar incomodidades adicionales.
Este sesgo puede manifestarse en muchos ámbitos:
Reconocer esta falacia y trabajar para superarla requiere un enfoque consciente:
“Es fácil sobrevalorar el pasado al tomar decisiones para el futuro.”
— Richard H. Thaler
Esta reflexión enfatiza cómo nuestra tendencia a aferrarnos a las inversiones pasadas puede nublar nuestro juicio, evitando que avancemos hacia mejores oportunidades.
Para comprender más a fondo este y otros sesgos económicos, te recomendamos el libro Misbehaving: The Making of Behavioral Economics de Richard H. Thaler, donde explica de forma accesible cómo las decisiones irracionales afectan nuestra vida y la economía global.
La falacia del costo hundido es un recordatorio de cómo nuestras emociones pueden interferir con nuestra lógica. Al reconocer este sesgo, podemos aprender a dejar ir lo que no funciona y redirigir nuestros esfuerzos hacia decisiones más sabias y beneficiosas.
¿Qué experiencias has tenido con la falacia del costo hundido? ¿Qué estrategias has utilizado para superarla? Comparte tus reflexiones en los comentarios y acompáñanos mañana para explorar otro sesgo cognitivo: El Efecto Dunning-Kruger. ¡No te lo pierdas!